En Godoy Cruz 1585, Sigue al Conejo Blanco propone cerveza artesanal tirada, tragos, pizzas corazón y pantalla gigante en un ambiente inspirado en el maravilloso mundo de Alicia pero en Buenos Aires
En la “madriguera” se dan clases de tango, hay convocatorias para que artistas puedan exponer sus obras y se proyectan partidos de fútbol, boxeo, películas retro como “Batman” y hasta pasan las series más populares de los últimos tiempos, votadas por los habitué en su fan page.
Ubicada en Palermo Viejo, la cerveza artesanal tirada bien espumosa se convierte en el gancho de la noche de este restobar chiquito, oscuro pero cálido, como buena madriguera. Atendido por sus dueños hay carta eco-friendly para veganos, celíacos y vegetarianos, picadas y papas cerveceras. “Nuestro concepto es que todo sea abundante y para compartir” dicen desde la madriguera.
La pizza corazón es el emblema de la casa. “La respuesta fácil sería decir que la pizza corazón se dio por la Reina de Corazones. Nuestro bar pizzería es temático, inspirado en la obra de Lewis Carrol, pero la respuesta verdadera es que todo el menú fue armado por los clientes”, nos dice Loli, la dueña de Sigue al Conejo Blanco.
“Cuando empezamos solo teníamos pizzas individuales a lo que sumamos la Picada de pizza o ‘Sombrerero’, de tres sabores, pensado para grupos, así podían probar varios gustos. Los nombres están todos inspirados en personajes de Alicia en el País de las Maravillas como la Reina Blanca, Reina Roja, Humpty Dumpty, Alice, conejo… Así, los clientes comenzaron a hacer sugerencias, nos decían qué querían ponerle a las pizzas y juntos las armabamos”, agrega la propietaria.
“La pizza corazón surgió una noche en que le iban a pedir matrimonio a una clienta y ameritaba una pizza llena de amor, que es como cocinamos en El Conejo”, remata Loli rematando: “Esta es la versión no oficial” y se ríe.
La pizza corazón que se puede pedir mitad y mitad y pizza de tres gustos siempre abundantes. Wi Fi, mesas en la vereda y de plus, las mozas; todos resaltan la buena atención de las muchachas. Solo aceptan efectivo.
